Este pequeño articulo esta escrito sin tildes, porque Debian asi lo ha querido. Es el tipico alegato rabioso que me da por soltar de vez en cuando a mi y a algun que otro sufrido usuario de Linux. Yo, en particular, debo ser bastante gafe, de otro modo no me explico como a tan solo tres dias de ensalzar la estabilidad de Debian Stretch con KDE ya he tenido que solucionar varios problemas que uno no espera en una version supuestamente estable. Esto es que no hay quien lo entienda. En pleno 2018, Linux sigue igual: si actualizas malo, si no actualizas casi peor. Es para estar hasta los huevos, con perdon de la expresion, pero estamos aqui para despotricar.